YouTube lanzó en 2021 los Shorts, su formato de vídeos cortos para competir con TikTok. Desde entonces, la plataforma no ha parado de potenciarlos, posicionándolos en la página inicial y ofreciendo monetización a sus creadores. Sin embargo, todo parece indicar que ahora YouTube desacelerará el crecimiento de los Shorts porque temen que puedan canibalizar a los vídeos largos, que son su negocio principal.
Según Financial Times, a algunos directivos de YouTube les preocupa que los Shorts estén restando espectadores a los vídeos de larga duración, que generan más ingresos para la empresa.
Además, de acuerdo a datos internos de la plataforma, los creadores están haciendo menos vídeos de larga duración, impulsados por la falta de apetito de los consumidores. Y por si fuera poco, los anunciantes también se están decantando por los contenidos cortos a la hora de encargar la colocación de productos.
YouTube tiene un dilema: los Shorts amenazan con canibalizar su negocio principal de vídeos largos
Esto es un problema para YouTube, ya que los vídeos largos permiten más publicidad y un mayor porcentaje de clics en los anuncios de sitios de comercio electrónico.
El declive de los vídeos largos no es solo un problema de YouTube. Otras plataformas, como Netflix y Hulu, también están experimentando un descenso en el número de espectadores de su programación original. Es probable que esto se deba a la popularización de apps como TikTok, que ofrecen una mayor variedad de contenidos más breves y fáciles de digerir.
En su momento, YouTube dijo que los Shorts están diseñados para complementar, no para competir, con todos los demás formatos que utilizan los creadores en la plataforma. Por tanto, está claro que YouTube no quiere que los Shorts se conviertan en su negocio principal.
Queda por ver cómo afrontará YouTube el reto planteado por los Shorts. La empresa podría limitarlos reduciendo su monetización o alcance, o podría buscar formas de hacer que los vídeos largos resulten más atractivos para los espectadores y creadores. Haga lo que haga, YouTube tendrá que encontrar una manera de equilibrar las necesidades de sus creadores, sus espectadores y sus anunciantes. Y tú… ¿qué opinas?
