Mucho se dice sobre el cuidado o los peligros que pueden estar detrás de las baterías de los móviles. Muchos también se preguntan: ¿es mejor cargar la batería del móvil con este apagado? ¿Cuándo debería ponerse a cargar el móvil? Y, por supuesto, el tema en el que se centra este artículo: ¿Es malo dejar el teléfono enchufado todo el tiempo?
Lo cierto es que se tienden a poseer creencias que no son del todo ciertas. O que, al final, la ciencia acaba aclarando y corrigiendo. En este caso es lo mismo. Para poder llegar a la respuesta definitiva, es necesario saber primero qué pasa cuando se carga una batería y si realmente sucede algún daño cuando sobrepasa su límite del 100%.
¿Cómo funciona el proceso de cargar la batería del móvil?
Las baterías funcionan con una combinación de químicos y electrones. Es decir, su composición química contiene electrones que, al exponerse a la corriente de un enchufe, comienzan un proceso en donde generan más electrones que cargan la batería.
Dicho con sencillez, el proceso de cargar un teléfono funciona de la siguiente forma. Una vez que se enchufa el cargador conectado al móvil, la corriente genera que los electrones dentro de la batería se muevan. Estos parten del polo negativo al positivo, y con ello, se crea una energía potencial química que produce más electrones. De esta forma las baterías se cargan y vuelven a tener suficiente poder para mantener los móviles andando.
Una vez que desconectas el cargador, estos electrones vuelven a viajar hacia el polo negativo, convirtiéndose en electricidad. De esta forma es que se convierten en la energía necesaria para mantener el móvil encendido hasta que se terminan agotando y necesitan nuevamente de la carga.
Existen sistemas que protegen el móvil de la sobrecarga
Lo que más preocupa del proceso de carga en los móviles es que esto con el tiempo tienda a dañar la batería “si no se hace bien”. En realidad, lo que degrada las baterías es la repetición continúa de los ciclos de carga, y mientras más largos son, más probabilidades hay de que se dañen con mayor rapidez.
Es por eso que se suele recomendar realizar cargas cortas, que vayan del 20% de batería al 80%. No obstante, el hecho de cargar un móvil al 100% no quiere decir que lo estarás dañando si se sobrepasa y dejas el móvil enchufado más rato. Para ello, el propio dispositivo tiene un sistema de protección que detiene la carga una vez alcanza su máximo punto.
Algo que suena bien, pero que si razonamos a conciencia, a la larga podría también deteriorar la batería. Pues una vez baja de porcentaje de carga (incluso tan solo al 99%), el ciclo comienza otra vez hasta llegar al 100%, se detiene, baja de nuevo, y vuelve. Estaríamos hablando de múltiples ciclos cortos repetitivos durante ese tiempo.
Para combatir este problema, actualmente muchos móviles Android y iPhone tienen otro sistema que previene la perpetuación de dichos ciclos repetitivos mientras dejas el móvil cargando más del tiempo necesario. Lo que hacen es simple: vienen con sistemas de cargas que mantienen el móvil en 80% para que luego, tras desconectarlo, se complete la carga del 20% restante.
Entonces, ¿se puede o no dejar el teléfono enchufado?
La respuesta corta para la pregunta principal de este tema sería que, probablemente, sí sea posible dejar el teléfono enchufado sin temor a nada. Después de todo, con sus sistemas de protección y las múltiples pruebas de seguridad que se realizan con las baterías de los móviles antes de lanzarlos al mercado, los riesgos de sufrir algún accidente son mínimos.
Teniendo el móvil enchufado por siempre, arranca de golpe el miedo a que la batería se degrade de esta forma, pues desde esta perspectiva, no importaría realmente. La fuente de energía seguiría siendo el enchufe para estos casos.
¿Es conveniente hacer esto? Tal vez no. ¿Implicaría un daño irreparable para el móvil? Tampoco. Al final quedará a tu criterio decidir si es buena idea dejar el móvil conectado siempre a la corriente. Eso sí, procura de que, al hacerlo, estés utilizando el cargador ideal.
