El móvil perfecto no existe, olvídense. No hay un solo móvil en el mercado que pueda satisfacer las necesidades de todos. Algunos quieren un gran diseño, otros una gran autonomía y muchos quieren una gran cámara pero no hay ninguno que reúna todos los requisitos.
El Galaxy Note 8 ha sido presentado y lo cierto es que tiene muchas papeletas para convertirse, junto al Galaxy S8 y otros móviles, uno de los mejores del año. Ahora bien, creo que cuando Samsung diseñó el móvil supo que este tendría carencias y pese a que el móvil es impresionante hay 5 cosas que Samsung podría haber mejorado. El Galaxy Note 8 tiene un diseño brillante, hardware de bandera, una cámara con doble lente estabilizada, y muchas más cosas pero hay algunas carencias que no lo han vuelto el móvil perfecto.
Los 5 errores del Galaxy Note 8
Vamos a analizar paso a paso todo lo que lleva el Galaxy Note 8 y sacar la puntilla en las 5 cosas que nos hubiese gustado ver en este Note 8.
No hay una versión con pantalla plana
Todos sabemos que Samsung, este año, ha renunciado a las pantallas planas y lo cierto es que las pantallas de tipo Edge lucen mucho mejor y más si son Infinity Display. Ahora bien, pese a que son futuristas hay detalles que molestan.
¿Cómo se pone un buen protector de pantalla en una pantalla curva? Es prácticamente imposible a menos que sea de aplicación líquida. Eso sí, por su precio seguro que más de uno quiere protegerlo pero va a ser muy complicado.
El lector de huellas, la misma cagada que en el Galaxy S8
Cuando hicimos la review del Galaxy S8 ya adelantamos que había un gran error. La posición del lector de huellas en el Galaxy S8 no era nada correcta y en el Galaxy Note 8 este sigue estando ahí.
Sí, no es que necesitemos el sensor de huellas en la parte frontal del móvil pero hubiese venido bien que estuviese centrado en la parte trasera y no al lado de la cámara donde los mortales tendemos a mancharlo.
La batería es una cagada, esto no es un Note
Hay que ver lo que pasó con el Galaxy Note 7. Samsung diseñó dos baterías que dos fábricas diferentes fabricaron mal pero el Galaxy Note 8 cuenta con una batería más pequeña que la del Galaxy S8 +. ¿Cómo te quedas?
La serie Note se caracteriza por estar adaptada a los hombres de negocios y por tener un hardware que aguante las condiciones más exigentes. En el caso del Galaxy Note 8 tenemos una batería de solo 3300 mAh para unas 6,3 pulgadas de pantalla y es relativamente poco. No entendemos cómo Samsung no lo ha dotado de una mayor autonomía y no es que vaya a ser mala pero los que se compran un Note esperan al menos 2 días de autonomía y con esta batería no va a ser posible.
Un software diferente, queremos más
Samsung vende muchos móviles y con ello vende un software que cada vez dista más de Android. Se trata de Samsung Experience y no de TouchWiz como muchos creen pero lo cierto es que el software no va nada mal.
Yo personalmente uso un Galaxy S8 en mi día a día y las funciones no es que vayan a distar mucho de este Note. Es cierto que tenemos un S Pen y algunas cosas nuevas pero… ¿de verdad hay novedades de software en el Note 8? Habría que explotar los bordes mucho más en cuanto a sus funciones y no tienen demasiadas…
Su precio es realmente elevado
Y ahora volvemos a lo de siempre. ¿De verdad hay un móvil que cuesta 1000 euros? Actualmente el Galaxy S8 se puede encontrar por un precio que ronda los 600 euros y lo cierto es que, salvo la cámara doble y el S-Pen, no hay muchas diferencias. Es un 40% menos de precio…
El Note 8 es un móvil caro, tiene un gran diseño, pantalla curva doble, cámara dual, un escáner de iris pero… ¿de verdad vale tanto dinero? El que se lo compre en preventa puede llevarse una Gear 360 gratis o un kit de carga inalámbrica con un disco duro. Y no, no cuesta 999 euros, cuesta 1010 euros con 33 céntimos, un precio muy pero que muy elevado en su versión de 64 GB y no de 256 GB.
Para nosotros estos son los 5 fallos clave que hacen que el Galaxy Note 8 no sea el móvil perfecto, en caso de no haberlos cometido creemos que el Note 8 estaría mucho más cerca de haberse convertido en ese móvil que todas las compañías quieren tener.
