Hay más de una forma de que nuestro móvil se convierta en un dispositivo resistente al agua, bien sea porque queremos grabar bajo el agua con un móvil no sumergible o porque no nos fiamos de la protección IP que nos cuenta el fabricante y queremos hacer algún experimento seguro con nuestro smartphone.
Muchos de los móviles que salen al mercado hoy en día cuentan con alguna protección frente al agua, algunos admiten salpicaduras, otros inmersiones pequeñas y los más atrevidos te permiten inmersiones de 30 minutos bajo el agua aunque, como aclaraba Sony hace unos días, estas inmersiones están realizadas en condiciones controladas y sin hacer uso del smartphone por lo que debes tener cuidado si usas tu móvil debajo del agua. Si tienes uno de estos móviles, sobre todo con protección IP67 que es muy habitual, no deberías preocuparte por una inmersión accidental pero en caso contrario, si tu móvil no cuenta con ningún tipo de protección IP es probable que debas seguir unos pasos muy sencillos en caso de accidente.
He mojado el móvil, ¿qué hago?
Si tu móvil se ha mojado lo primero y más sensato es coger el dispositivo y quitarlo del agua lo antes que puedas, si ya has hecho esto (esperemos que sí), una vez fuera lo apagas inmediatamente, no te pares a consultar nada. Lo mejor es incluso quitar la batería en tiempo record aunque en los chasis unibody esto no es posible.
Una vez apagado sacúdelo fuerte (ten cuidado de que no se te vaya de las manos), para eliminar la máxima cantidad de agua posible del smartphone y una vez sacudido debes desmontarlo todo lo que puedas (no hablamos de destornillador) sino que debes quitarle la batería si puedes, la tapa trasera en caso de ser extraíble etc.
Si el móvil se ha mojado pero no en agua dulce es conveniente que, una vez removida la batería, lo aclares con agua dulce sobre todo si ha sido agua salada para evitar la corrosión. Un pequeño chorro para remover el sal es más que suficiente.
Si tu móvil se ha caído al mar debes aclararlo con agua dulce
Una vez lo tengas desmontado puedes aprovechar y pasarle también un paño para eliminar la cantidad de humedad que queda de forma superficial pero nos queda un último paso, sumergir el móvil en arroz. Puede que parezca una tontería pero el arroz absorbe la humedad y por eso mismo vamos a meter nuestro móvil en un bol con arroz totalmente cubierto durante 24 o 48 horas, a poder ser en un sitio ventilado para que actúe todavía mejor.
Una vez hecho esto ya solo te queda montarlo de nuevo y a funcionar. Si la inmersión no ha durado mucho el móvil no debería haber sufrido ningún tipo de daño, pues la mayoría de móviles actuales aguantan bastante bien las inmersiones, puedes ver algunos de los test de resistencia al agua más extremos que hemos visto, el último un test de resistencia al agua del Ulefone Paris, un smartphone que sin resistencia al agua es capaz de grabar debajo de la misma. Además de este método también existen empresas como Waterrevive que afirman ser capaces de recuperar nuestro smartphone pero por el feedback que han dado los usuarios recomendamos probar antes con nuestro método, esperamos que os sirva para algo.
Aunque tu móvil se recupere, que será en la mayoría de los casos, puede que esta inmersión accidental haya ocasionado daños. Lo primero sería consultar el altavoz (una de las partes que más suele estropearse) y a la vez también deberías revisar la batería, si esta se ha hinchado un poco o se gasta muy rápido puede que se haya estropeado en la inmersión pero el resto del smartphone esté completamente a salvo y se solucione el problema cambiando la batería.
Nos gustaría saber si se te ha mojado y estropeado un móvil, si habías hecho esto antes o si lo vas a hacer con tu móvil mojado y nos vas a contar la experiencia. Anímate a decirnos tus vivencias en los comentarios.
