Durante las últimas semanas del 2018, un estudio llevado a cabo por la compañía Pew Research Center, informó que cerca del 72% de los usuarios que utilizan Instagram (más de 1.000 millones de personas usan la plataforma) son jóvenes de entre 12 y 25 años de edad.
En conjunto con ese informe, se realizó un estudio de mercado que fue llevado a cabo por Ditch The Label, organización británica conocida por luchar contra el bullying, en el que informaron que Instagram es la red social más tóxica de todas. Según dicho estudio, el 42% de los adolescentes dentro de esa plataforma sufrieron algún tipo de acoso online.
Instagram quiere evitar que publiques contenido inadecuado
Luego de mucho tiempo de desarrollo, gracias a la ayuda de distintas organizaciones, la red social Instagram ha extendido su herramienta anti-bullying a los pies de las fotos y los vídeos. Esto significa que, si alguien tiene la intención de acosar a alguien mediante un contenido que él mismo tiene pensado publicar, verá el siguiente mensaje:
“Esta publicación tiene un aspecto muy similar a otras que han sido reportadas. ¿De verdad quieres publicar esto?”
Como se puede observar, Instagram les preguntará a los usuarios antes de publicar contenido que podría llegar a ser inadecuado, o sea, contenido que podría legar a tener lenguaje potencialmente ofensivo. Si bien hace un par de meses lanzaron esta herramienta, la misma ahora también funciona con vídeos y fotografías.
De la misma forma, en vez de bloquear el contenido de forma automática, algo que sería censurar contenido, la inteligencia artificial implementada en Instagram se encargará de preguntarle a los usuarios si realmente están seguros de publicar este tipo de contenido.
¿Qué sucede si se publica ese tipo de contenido?
Instagram ha informado que si ese contenido, ofensivo claro está, se publica y posteriormente recibe más de 100 denuncias, podría ser eliminado. Además, si ese usuario suele publicar este tipo de contenido a menudo, la red social podría tomar medidas que van desde una suspensión temporal de la cuenta, hasta la inhabilitación total de la misma.
