En los inicios de Internet, crear una contraseña era bastante sencillo, ya que los sitios web no nos exigían una determinada extensión o el uso de caracteres especiales. Nuestra contraseña podía ser una simple palabra de 5 letras, que era imposible olvidar. Sin embargo, Internet fue evolucionando y los delincuentes informáticos (hackers) encontraron las maneras de descubrir ese tipo de contraseñas fácilmente.
De ahí a que, en la actualidad, los sitios web nos pidan que nuestras contraseñas sean más complejas (largas y con distintos tipos de caracteres) para evitar el robo de cuentas. El problema es que estas contraseñas seguras son fáciles de olvidar y nos complican la vida. Por ello, aquí hemos preparado una guía para ayudarte a crear contraseñas seguras que realmente puedas recordar.
¿Qué debería tener una contraseña para ser segura?
Antes de nada, debes comprender qué se considera una contraseña segura y qué elementos la componen. En ese sentido, la mayoría de sitios web dicen que una contraseña debería tener lo siguiente:
- Entre 8 y 14 caracteres.
- Al menos una letra mayúscula.
- Al menos un número.
- Al menos un carácter especial (#, @, etc.).
Además, la contraseña no debe ser fácil de adivinar: no debe contener tu nombre, apellido o número de DNI, por ejemplo. Si creas una contraseña que cumpla con todo eso, ya puedes considerarla una contraseña segura que será prácticamente imposible de robar por los hackers.
¿Qué más puedes hacer para que tu contraseña y cuenta sean más seguras?
El modelo de contraseña segura que te presentamos anteriormente lleva en Internet desde hace muchos años y los hackers han descubierto ciertas vulnerabilidades en él. Por ejemplo, la gente suele usar la letra mayúscula en la primera letra de la contraseña, sustituyen la «a» por «@» y los números los dejan al final de la misma y normalmente son 123. Además, muchas personas siguen cometiendo el típico error de que su contraseña sea la palabra contraseña (con pocas variaciones).
Por suerte, existen diversas formas de hacer que tu cuenta sea más segura y no necesariamente tienen que ver con la contraseña. Así que, mira los siguientes consejos de lo que debes hacer y lo que no debes hacer para blindar tu contraseña y cuenta.
Lo que debes hacer
- Activa la verificación en dos pasos: muchos servicios y sitios web ofrecen esta capa de protección extra a tu cuenta, que consiste en solicitar dos «llaves» para acceder a la misma. La primera llave sería la contraseña y la segunda puede ser la verificación del móvil. De esa manera, es casi imposible que los hackers accedan a tu cuenta. Por ejemplo, en este post te enseñamos cómo activar la verificación en dos pasos de Gmail.
- No uses palabras comunes en la contraseña: anímate a buscar en el diccionario palabras poco comunes que puedas usar en la contraseña y que sean difíciles de adivinar.
- Usa varios símbolos especiales: si bien te dijimos que con un carácter especial es suficiente para crear una contraseña segura, puedes blindar aún más la contraseña si agregas más símbolos especiales.
Lo que no debes hacer
- Re-usar contraseñas: para evitar olvidarlas, la gente suele poner las mismas contraseñas en todas sus cuentas. Esto es muy conveniente para el cerebro, pero no tanto para la seguridad de las cuentas. Y es que, si hackean una de tus cuentas, hackearán todas. Así que, evita hacerlo.
- No guardes las contraseñas en un documento sin cifrar: si guardas todas tus contraseñas en un documento de texto, lo mejor sería que ese documento estuviera cifrado, ya que algunos hackers pueden leer fácilmente lo que tienes en tu dispositivo. Para cifrar el texto (las contraseñas) puedes usar una app como Secret Codes, con la que podrás cifrar y descifrar las contraseñas cuando quieras.
Pasos para crear una contraseña segura que puedas recordar
Ahora que ya sabes cómo es una contraseña segura y qué la compone, seguramente estás pensando que una contraseña de ese tipo es muy difícil de recordar. Y estás en lo cierto. Por ello, a modo de tutorial, en esta sección te explicaremos algunas técnicas que puedes usar para crear una contraseña segura que no olvidarás nunca.
Método 1: crea una contraseña a partir de una frase
Este método consiste en convertir una de tus frases favoritas en una contraseña que nadie pueda adivinar, pero que tú no podrás olvidar. Sigue estos pasos para aplicarlo:
- Piensa en una frase que te guste y que siempre recuerdes (puede ser de una canción, película o libro). Por ejemplo: «solo sé que no sé nada» del filósofo Sócrates.
- Ahora toma la primera letra de cada palabra de la frase y crea una nueva palabra con ellas. Siguiendo con el ejemplo anterior, quedaría: ssqnsn.
- Así ya tenemos la palabra base de nuestra contraseña que será imposible de adivinar para cualquiera, pero fácil de recordar para nosotros. Para hacerla más segura, agrega un carácter especial al final o al inicio de la palabra, así como una letra mayúscula. A la palabra del ejemplo le ponemos un @ al inicio y quedaría así: @Ssqnsn.
- También es necesario añadirle números, así que piensa en una fecha relacionada con la frase (para que tampoco se te olvide). Por ejemplo, Sócrates murió en el año 399 a. C., por lo que podemos poner ese número en la contraseña de esta forma: 3@Ssqnsn99.
De esa manera, en el ejemplo hemos creado una contraseña de 10 caracteres que parece un código sin sentido, pero que tiene un significado que podemos recordar.
Método 2: usa una frase sin sentido como contraseña
Nuestro cerebro tiene una capacidad extraordinaria de memorizar frases largas, aunque no tengan sentido, sobre todo si tienen ritmo. Esa es la razón por la que puedes aprender canciones en inglés, pese a que no las entiendas. Puedes aprovechar esa capacidad a tu favor para crear una contraseña segura y fácil de recordar de esta forma:
- Piensa en una frase larga, pero que no tenga sentido. ¿Por qué? Pues porque si usas una frase como «las hojas del árbol son verdes», los hackers pueden usar un programa que (al igual que los teclados con motores predictivos) podrá adivinar la frase completa con solo saber el comienzo de la misma. Por ejemplo, una buena frase sin sentido sería: «Messi esquiva a los ovnis pensadores» (pon también los espacios en la contraseña).
- Esa frase de contraseña que pusimos como ejemplo es segura, pero los sitios web te pedirán que agregues números, mayúscula y caracteres especiales para hacerla invulnerable. Así que, la frase de contraseña final quedaría así: «Me$$i Esquiva a los 0vnis Pensad0res».
Una frase de contraseña como esa es imposible de hackear o adivinar.
Método 3: usa la técnica PAO
La técnica de memorización PAO (Persona-Acción-Objeto) consiste en aprovechar la capacidad de nuestro cerebro para recordar momentos extraños. Con esta técnica puedes crear, una contraseña muy segura y recordable siguiendo estos pasos:
- Elige a una persona y a un objeto cualquiera, sin pensarlo mucho. Por ejemplo: Michael Jackson y un avión.
- Ahora escoge una acción que vincule a la persona con el objeto. Por ejemplo: comer.
- De esa manera, ya puedes construir una frase siguiendo el orden Persona-Acción-Objeto, como esta: «Michael Jackson comiendo un avión». Si quieres, puedes alargarla un poco más añadiendo adjetivos o una ubicación de esta manera: «Michael Jackson comiendo un avión rojo en Barcelona».
- Una vez construida la frase con la técnica PAO, usa el método 1 o 2 para transformarla en una contraseña. Siguiendo con el ejemplo, si aplicamos el método 1, quedaría así: «20MJcuareB#09». Si aplicamos el método 2, quedaría así: «Mich@el J@cks0n c0miend0 un avi0n r0j0 en B@rcel0n@».
¡Y eso es todo! Elige el método que más te guste y sigue todos los consejos que aquí te dimos para crear contraseñas seguras y no olvidarlas nunca. Por último, si eres muy olvidadizo, también te recomendamos usar herramientas como las apps que te permiten guardar contraseñas en Android.