Si hay algo que no le falta a Apple son, precisamente, las polémicas. La semana pasada hablábamos, por ejemplo, de lo que (como opinión personal) me parecían los iPhone XS y compañía. Esta vez, sin embargo, el frente es completamente diferente, y es que varias activistas feministas se están echando encima de Apple, ¿qué es lo que ha pasado?
Las feministas acusan a Apple de no tenerlas en cuenta
Las críticas han empezado a llegar a Apple desde varios sectores feministas por un motivo muy concreto: el tamaño de sus móviles. Y es que consideran que Apple las invisibiliza al no incluir una opción de tamaño más contenido en sus últimos flagship. Pero la verdad es más bien distinta.
Deberíamos estar furiosas por esto, pagamos tanto dinero por ello como hombres por un producto que no funciona tan bien para nosotras
En primer lugar, sin entrar a valorar su petición, algo que haremos después, no nos parece la manera más fructífera de conseguir un cambio en Apple. Y es que sus directivos no van a atender a lo que diga un sector del público (de hecho, no escuchan al público en general). Si quieres que te escuchen, no compres sus productos hasta que cambien. Tienes la alternativa a la vuelta de la esquina: el Pixel 2 es manejable para todos.
La pregunta del millón: ¿es Apple machista?
Ya moviéndonos en terrenos más pantanosos, tenemos que decir Apple no es machista, o al menos no por esto en concreto. Y es que no atiende a una razón de género, sino que la cuestión responde a una demanda del mercado. Seamos realistas: todas las marcas han aumentado el tamaño de sus diagonales de pantalla, pero no porque sean machistas, sino por varias razones:
- El boom del multimedia: cada vez consumimos más contenido multimedia, y cuanto mayores sean las pantallas, mejor disfrutamos las series y películas.
- Los propios usuarios: aunque nos parezcan grandes las pantallas, seguimos comprándolas. De hecho, el OnePlus 6 que llevo en mi día a día se me hace algo grande a ratos, pero acaba por no importarme al final del día. Como yo, miles y miles de usuarios, que acabamos consiguiendo que las marcas den prioridad a sacar modelos con una diagonal mayor.
En definitiva, aunque haya quienes quieran pensar que son otros los que deciden crear pantallas mayores, somos los propios usuarios los que, con nuestros actos lo estamos pidiendo. ¿Van entonces las 6 pulgadas contra el feminismo?