Estás leyendo un artículo y, de pronto, te aparece la palabra «blockchain». Vas al diccionario y su significado literal es «cadena de bloques». Te quedas igual, ¿verdad? No te preocupes. Es algo que nos ha pasado a todos la primera vez que nos hemos enfrentado a este término. Hoy, por fin, queremos quitarte la duda definitivamente y sumergirnos con detalle para ver en qué consiste esto del blockchain.
Y lo hacemos porque a partir de ya el blockchain va a ser un concepto que nos va a acompañar muy a menudo. Un término cuya misión técnica, entre otras, será la de eliminar los intermediarios de cualquier operación. Pero lo mejor es que lo veamos a continuación con un ejemplo y pasemos de más palabras técnicas. Ya verás qué fácil.
Qué es el blockchain y cómo funciona
Hasta ahora, cada vez que haces una transferencia bancaria es el banco quien se encarga de pasar el dinero de una cuenta a otra. Es decir, no tienes que llevar los billetes e ingresarlos en la cuenta de destino. Lo que resulta que, entre otras cosas, dependas del banco para hacer la transferencia según sus condiciones y sus comisiones.
Con el blockchain la cosa cambia. Al eliminarse los intermediarios (el banco), el control de la transferencia pasa a ser de los usuarios (tú y el destinatario del dinero). Lo que quiere decir que la gestión se descentraliza por completo.
La cadena de bloques
Ahora te preguntarás: ¿y lo de la cadena de bloques? Volvamos de nuevo a imaginarnos la situación. La cadena de bloques sería algo así como un gran libro de cuentas en el que los bloques (los registros) estarían enlazados y cifrados para mantener en todo momento la privacidad y la seguridad de las transacciones.
Blockchain es, en definitiva, un sistema que se halla detrás de la moneda virtual (bitcoin). Una tecnología que permitirá la transferencia de datos digitales mediante una codificación totalmente segura. Una transferencia que, como acabamos de decir, no requerirá de un intermediario que certifique la gestión. Serán los diferentes bloques independientes los que la registren y la validen.
¿Y esto solo funcionará en el ámbito económico? Ni muchísimo menos. Por ejemplo, el blockchain servirá también para que se elimine la centralización de aplicaciones como Facebook o Twitter a la hora de identificarnos o validar la procedencia de nuestros mensajes. Pero hay otros casos más curiosos de uso del blockchain…
Y Xiaomi se lanza al blockchain con sus… ¿criptoconejitos?
Uno de ellos lo va a poner en práctica Xiaomi. La compañía china no solo quiere abarcar mercado en materia de gadgets, accesorios y dispositivos, sino que también se introduce en el mundo de las criptomonedas y los criptojuegos. Y lo hace a través de un servicio que lleva por nombre Jiami Tu.
Jiami Tu es una plataforma de criptoconejitos. Los usuarios de cuentas de Xiaomi podrán adoptar a estos criptoconejitos de diferentes diseños para cuidarlos y venderlos. Lo más curioso de todo es que los algoritmos que controlan y gestionan la escasez de estos criptoconejitos son similares a los que se emplean en las plataformas de criptodivisas.
Hasta la fecha, el lanzamiento de criptoconejitos es limitado. Tanto es así que no sabemos cuántos se han puesto a la venta. Lo que sí es cierto es que en China ha resultado un boom (¡cómo no!) y en apenas una hora se han agotado todos los conejitos que había en adopción.
Tampoco sabemos si Xiaomi hace uso de una cadena de bloques propia o ha tomado como base la cadena de bloques de Ethereum.
En definitiva, lo que queremos es que comiences a entender un poco lo que significa el término blockchain. Algo que durante este año, y en los venideros, puede convertirse en una norma muy usual en nuestro día a día. Y, tal y como vemos en Xiaomi, puede llegar de múltiples maneras.
¿Habías oído ya hablar antes del blockchain?, ¿qué repercusión crees que puede tener?