
Cuando pienso en mi móvil, siempre me sorprende la increíble cantidad de cosas que puede hacer. Es una navaja suiza moderna: hace de teléfono, cámara de fotos, videoconsola, escáner, método de pago, etc. Sinceramente, creí que habíamos llegado al punto en el que ya no se le podía añadir ninguna otra nueva función a los smartphones.
Pero, afortunadamente, el mercado siempre te asombra. Parece que sí es posible dotar a tu compañero de bolsillo de una nueva habilidad, una de nivel profesional. Tuve la suerte de probar durante las últimas semanas un pequeño dispositivo que demuestra esta idea a la perfección: la cámara térmica GOYOJO GW340.
Es tan pequeña que cabe sin problemas en cualquier bolsillo y al enchufarla al móvil lo transforma en una herramienta de diagnóstico e inspección con precisión industrial, lista para detectar fugas, fallos eléctricos y más, tanto en el ámbito doméstico como en el profesional. A continuación, te cuento qué tal me ha parecido y si vale la pena comprarla.
GOYOJO GW340: una cámara térmica de bolsillo para el móvil con seguimiento inteligente y precisión industrial

Básicamente, la GOYOJO GW340 es un «dongle» ultracompacto para móviles equipado con un sensor de infrarrojos que se alimenta y transmite datos a través del puerto USB-C. Es una solución mucho más accesible, versátil y fácil de usar que las voluminosas cámaras térmicas tradicionales, que suelen costar una fortuna.
¿Y por qué necesitamos esto? Pues el calor y los cambios de temperatura revelan cosas invisibles para el ojo humano. Con esta cámara térmica puedes descubrir el origen de un cortocircuito, una tubería obstruida, una fuga de aire, el fallo de un componente y mucho más.
Es la herramienta definitiva de diagnóstico rápido y no invasivo para atender problemas del hogar, del coche o industriales. Y también se puede usar con fines educativos. Antes contarte mi experiencia, te invito a echarle un vistazo a su ficha técnica:
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Características
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GOYOJO GW340
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| Dimensiones | 4,50 x 1,09 x 3,40 cm. |
| Rango de medición | Entre –20 ºC a 400 ºC (-4 °F a 752 °F). |
| Cámara infrarroja | Resolución nativa de 256 x 192 píxeles de 12 μm (resolución mejorada por IA de 512 x 384 píxeles) con una frecuencia de actualización de 25 Hz. |
| Precisión térmica | ± 2 °C / ± 2 %. |
| Eficiencia energética | Consumo ultrabajo de la batería del móvil de 0,31 W. |
| Conectividad | USB-C (incluye un adaptador Lightning). |
| Paletas de color | 15 modos de color (blanco caliente, negro caliente, rainbow, sepia, rojo caliente, etc.). |
| Compatibilidad | Android 12.0 o superior y iOS 15 o superior. |
¿Cómo es la cámara térmica GOYOJO GW340?
El unboxing de la GOYOJO GW340 es tan directo como lo es la propia cámara. Al abrir su caja, me encontré solo con lo esencial: la cámara térmica, pequeña y lista para la acción, y un adaptador Lightning, lo que demuestra que la marca pensó en la compatibilidad para todos, incluso para quienes tienen un iPhone 14 (o modelos anteriores) sin USB-C.
Este packaging minimalista es, de hecho, un reflejo de la filosofía del producto: es dispositivo plug-and-play. Es decir, solo lo conectas al puerto de tu móvil, abres la aplicación, y listo. No hay baterías que cargar, ni complejas configuraciones iniciales.
En cuanto a la calidad de construcción, la sensación que te da es la de un producto prémium. Está fabricada en aluminio ultrarresistente, lo que no solo le da un acabado de lujo que se siente muy bien al tacto, sino también una gran resistencia a caídas y entornos industriales. Se nota que es un dispositivo hecho para durar años.
Su diseño compacto es el reflejo de su portabilidad. Con unas dimensiones minúsculas de solo 4,50 x 1,09 x 3,40 cm, la GOYOJO GW340 es increíblemente práctica y versátil, cabe perfectamente en el bolsillo de cualquier pantalón o camiseta, lo que facilita llevarla a cualquier trabajo o inspección.
El único punto de interés visible en su diseño es, lógicamente, la cámara infrarroja. Aquí es donde reside la magia, pues, a pesar de su tamaño, tiene características impresionantes: una resolución nativa de 256 x 192 píxeles de 12 μm, que se mejora por IA hasta alcanzar los 512 x 384 píxeles. Todo esto se mueve a una fluidez de 25 Hz y cuenta con un amplio campo de visión de 50° que permite abarcar grandes áreas rápidamente.
Mi experiencia con la GOYOJO GW340: así de bien funciona esta cámara térmica
Como comenté antes, el diseño plug-and-play de la GOYOJO GW340 es su mayor fortaleza, y esto se traduce en una experiencia de usuario increíblemente fluida. No necesitas ser un ingeniero ni haber usado antes una cámara térmica antes; es muy intuitiva.
El primer paso es sencillo: conectarla al puerto USB-C de tu móvil y descargar su aplicación gratuita para Android e iPhone, THG Start, disponible tanto en la Play Store como en la App Store. Una vez dentro, ya puedes comenzar a ver el mundo a través de su visión térmica infrarroja.
En cuanto a la calidad de imagen, es importante ser sincero: la resolución visual es baja comparada con la cámara fotográfica de tu móvil, algo que es totalmente normal. Las cámaras térmicas se centran en la información de calor, no en la fidelidad fotográfica. A pesar de esto, la resolución ofrece suficientes detalles para diferenciar objetos, componentes y estructuras con claridad.
Una vez aclarado esto, hay que decir que el reporte de temperatura es intuitivo, preciso y altamente personalizable. En tiempo real, la pantalla te muestra el gradiente de calor con colores brillantes, y una leyenda lateral te indica qué tonalidad corresponde a las temperaturas más altas y bajas.
Si no te gusta el esquema de colores predeterminado, cuentas con hasta 15 paletas de colores diferentes para adaptarlas a tu vista o al tipo de inspección que estés realizando. Además, puedes tomar fotos y hasta grabar vídeos de lo que estás inspeccionando con la cámara térmica.
Pero mi función favorita fue el seguimiento automático inteligente. La cámara no solo te muestra el mapa de calor, sino que de forma autónoma señala el punto más caliente, el más frío y el de temperatura intermedia de lo que hay en pantalla, mostrando la cifra exacta en grados centígrados.
Pero… ¿Qué tan preciso es? Pues la marca promete una precisión industrial con un margen de error mínimo de ± 2 °C, y he de decir que cumple. Al comparar sus mediciones con un termómetro láser de referencia, las diferencias eran insignificantes.
Además, me sorprendió su amplísimo rango de detección de temperatura, que va desde los –20 ºC hasta los 400 ºC. La aplicación te permite escoger entre dos niveles de rango: el nivel bajo (–20 ºC a 150 ºC), ideal para inspecciones domésticas como fugas de aire o fallos de aislamiento; y el nivel alto (100 ºC a 400 ºC), perfecto para diagnosticar maquinaria industrial o fallos en circuitos de alta potencia.
Finalmente, hay dos características que hacen que destaque sobre el resto. La primera es la posibilidad de establecer alarmas de temperatura. Puedes configurar alertas para que salten si se cruza un umbral de temperatura alta o baja. Esto es utilísimo para reparaciones o inspecciones dinámicas donde necesitas detectar un cambio crítico al instante.
La segunda, que no muchas cámaras térmicas ofrecen, es la función Picture-in-Picture (esa que crea una ventana flotante dentro de la imagen), que te permite superponer la imagen térmica con la imagen real, ofreciendo una comparación en tiempo real que facilita la identificación de los objetos que estás midiendo.
¿Se bebió la batería de mi móvil durante su uso? No, su consumo energético es ultrabajo (de solo 0,31 W), por lo que no tendrás que preocuparte de la batería de tu teléfono durante un uso episódico.
Veredicto final… ¿Vale la pena comprar la cámara térmica GOYOJO GW340?

Después de pasar varias semanas usando la GOYOJO GW340 en diferentes escenarios, desde revisar un fallo en casa hasta diagnosticar problemas en el motor de mi coche, mi conclusión es rotunda: esta pequeña cámara es una herramienta excepcional que redefine lo que puedes hacer con tu móvil.
Sus principales pros son evidentes y ya los comentamos anteriormente. Si tuviera que mencionar un «contra», sería, inevitablemente, el precio. La GOYOJO GW340 tiene un coste de 199 €, lo que puede parecer elevado para un accesorio. Sin embargo, hay que ver este precio como una inversión, no como un gasto.
Para el usuario promedio, esta cámara es un detector de problemas invaluable. Puedes identificar fugas de calor que te hacen gastar más en calefacción, detectar humedades antes de que causen daños estructurales, y diagnosticar fallos eléctricos o mecánicos en el coche que te ahorra visitas costosas de técnicos y reparaciones. Se amortiza sola.
Para el profesional, la GOYOJO GW340 es una herramienta indispensable. Su portabilidad la hace perfecta para inspecciones rápidas en campo, y sus aplicaciones industriales la hacen diferencial. Si buscas destacar en tu trabajo, llevar una herramienta de diagnóstico termográfico de esta calidad y precisión en el bolsillo es sinónimo de eficiencia y profesionalismo.
Si buscas transformar tu móvil en una cámara térmica profesional sin comprometer la portabilidad ni la precisión, la GOYOJO GW340 vale cada euro.
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LO MEJOR
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LO PEOR
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