Aquello de que las principales plataformas online nos vigilan y recolectan información es algo conocido por todo el mundo. Muchas compañías lo niegan e incluso introducen cambios en sus servicios para aumentar la privacidad de nuestros datos, pero lo siguen haciendo de alguna manera. Al fin y al cabo, en la era del Big Data la información vale más que el oro, así que esto no cambiará fácilmente.
Aun así, las leyes y los tribunales en ocasiones terminan poniéndose a favor de los usuarios, como acaba de pasar en 40 estados de Estados Unidos. ¿Qué pasó? Que Google fue multado por rastrear a los usuarios sin su consentimiento y tendrá que pagar 391,5 millones de dólares americanos.
¿A Google le gusta rastrear sin permiso? Entonces también le gustará pagar
Una coalición de fiscales generales de 40 americanos decidió abrir una investigación contra Google en respuesta a un informe de 2018 publicado por Associated Press. El documento reveló que la compañía estaba rastreando silenciosamente las ubicaciones de sus usuarios, a través de distintos servicios en iOS y Android. Esto estuvo pasando, al menos, entre 2013 y 2018.
Según el informe, los usuarios mantenían las funciones de ubicación desconectabas, pero Google seguía registrando datos sin decirles nada. ¿El objetivo? Utilizar los datos para vender anuncios personalizados.
Los fiscales de Nueva York, Florida, Oregón, Nebraska y demás estados involucrados en la investigación hicieron que Google firmase un acuerdo para resarcir los daños. Concretamente, la compañía tendrá que pagar 391,5 millones de dólares (unos 374 millones de euros al cambio actual). Además, deberá alertar a los usuarios cuando el seguimiento esté habilitado y a partir de 2023 tendrá que proporcionar información sobre cómo desactivar esta función.
A pesar del acuerdo alcanzado entre la justicia estadounidense y Google, esta última se defendió a través de una publicación en su blog. La compañía asegura que la investigación se basó en políticas que son obsoletas y ya han sido abordadas por ellos mismos.
Aun así, Google se comprometió a implementar nuevas características de privacidad en Android y sus servicios. Entre ellas, un centro único de información en el que «destacará la configuración de ubicación para ayudar a las personas a decidir qué datos desean compartir». Asimismo, Google dará información más detallada sobre cómo recopila y utiliza los datos de los usuarios. Finalmente, habilitará una nueva opción que permitirá desactivar y eliminar el historial de ubicación, actividad web y de las aplicaciones en un solo toque.
No es la primera vez que Google es multada por engañar a los usuarios
Como dato curioso a esta historia, resulta que no es primera vez que Google es multada en Estados Unidos por esta razón. Hace poco más de un mes, la compañía tuvo que pagar 85 millones de dólares al estado de Arizona por lo mismo. Además, actualmente enfrentan una demanda en Washington, Texas e Indiana por prácticas similares hechas en el pasado.