Soy usuario de los Samsung Galaxy desde que me he pasado a Android. En estos años por el mundo Android he usado de todo aunque mi principal smartphone siempre ha sido Samsung. Cuando recomiendo esta marca tengo clara una cosa, busco la mejor cámara del mercado y un móvil polivalente, con unas actualizaciones de Android decentes y un rendimiento potente.
Puede que cuando te dispongas a comprar un Samsung Galaxy S6 o un Samsung Galaxy S6 Edge no puedas fijarte mucho en el precio del smartphone, pues por lo general los móviles de esta compañía son relativamente caros aunque otras se le acercan bastante y con el paso del tiempo, unos meses después del lanzamiento, pueden conseguirse verdaderos chollos.
¿Por qué he escogido el Samsung Galaxy S6 para que sea mi móvil durante, al menos, un año?
Hemos hecho una completa review del Galaxy S6 en el momento de su lanzamiento pero al usarlo 4 meses sabemos mucho más del terminal, sabemos cómo ha sido su evolución, cómo funciona en todas las circunstancias y mucho más, es por eso que nos gustaría contároslo para que no os quedéis con la duda.
En cuanto a la variante Edge no le he encontrado gran utilidad a la pantalla curvada y, además, el agarre de este terminal se me hacía un poco complicado por lo que al final opté por la versión normal. Debes saber que no hay más diferencia del Galaxy S6 al Galaxy S6 Edge que la pantalla, si la cámara de la variante curva hubiese sido mejor seguramente me hubiese decantado por él pero como son idénticos en hardware no me quedaron dudas en cuanto a su elección.
Lo mejor del Samsung Galaxy S6
Cuando tienes la mejor cámara del mercado presumes de ella allá donde vayas. La cámara del S6 es lo mejor que he visto en mucho tiempo. Sí debo reconocer que la cámara del iPhone también es buena pero el S6 no le envidia nada, es una cámara muy rápida, polivalente y que hace fotos en todas las circunstancias de forma perfecta. Cuando aprendes a usarla todavía puedes sacarle más partido, es impresionante. A continuación os dejo una muestra de una simple foto (que ya he comprimido) pero el nivel de detalle y el enfoque siempre es perfecto en condiciones de luz tenue. La cámara frontal tampoco es tan mala, no es de las mejores del mercado pero cumple y saca unos selfies estupendos, hasta es capaz de sacar selfies en formato panorámico.
Otra cosa por lo que destaca el Samsung Galaxy S6 es su interfaz. TouchWiz se ha vuelto ligero, con menos bloatware que nunca y además te ayuda con esas pequeñas cosas de las que Android nativo prescinde. A su vez el móvil se siente muy rápido por su hardware y la autonomía, pese a no ser una maravilla, es mucho más de lo que una batería normal de 2550 mAh podría dar de sí.
Su diseño, a pesar de haber copiado algo del iPhone 6 (no lo podemos negar) es bastante bueno aunque sin una funda se agarra bien, da pena usarlo así porque tienes miedo a rallarlo. Es el primer smartphone que llevo sin protector en la pantalla y está impoluta, ni una sola ralladura. Es un smartphone bonito pero como siempre lo llevo con una funda su belleza se oculta un poco más de lo habitual.
El lector de huellas, a pesar de ser una tontería para algunos, funciona muy bien, es rápido y muy polivalente a diferencia del lector de huellas del S5 que tenías que deslizar el dedo. Nunca vamos a tener problemas para desbloquear el terminal de forma sencilla y cuando nos disponemos a usar cualquier cosa sabemos que tenemos máquina para hacer volar lo que sea. El límite lo pones tú.
Lo peor del Samsung Galaxy S6
Me gustaría dejar este apartado en blanco pero debo ser objetivo. No hay nada en el Galaxy S6 que cambiaría y es que el terminal me parece perfecto, a mi modo de ver las cosas y con el uso que le he dado durante 4 meses no he echado nada en falta, es más, me parece perfecto que hayan quitado algunas cosas como la microSD porque ahora el terminal se siente más rápido aunque los que quieran guardar muchas cosas verán en su almacenamiento una cantidad de GB justos cuando se compren el modelo de 32 GB pero yo aún tengo el 50% de espacio libre y no he borrado nada.
Tengo algo más de miedo a mojarlo que el S5 ya que no cuenta con protección IP de serie pero por lo que he visto en las pruebas de resistencia al agua sé que no se va a estropear por un chapuzón accidental aunque siempre estás más tranquilo cuando tiene la protección de serie.
También es cierto que a veces la batería se antoja algo justa, sobre todo cuando abusamos mucho de los datos o tenemos el brillo muy elevado. La pantalla de 2K brilla muchísimo y gasta bastante pero aún así está mucho más optimizada que otras al ser OLED. Es raro el día que tengo que darle un chute de carga a medio día aunque a veces sí lo hago pero gracias a su carga rápida en solo una hora puedo recuperar el 100% desde el 20% sin problemas. Se carga muy rápido y eso se agradece.
No le veo contras destacables pero lo que es importante para uno puede ser insignificante para otro
Ya poniendo la puntilla habría fabricado una cámara que no sobresaliese tanto, el problema es el de siempre, si apoyas el terminal en una superficie sin funda va a salir para arriba y no gusta, un smartphone plano hubiera gustado más por lo general pero la mayoría de fundas que hay en el mercado lo disimulan y, a la vez, protegen la cámara de los rallazos accidentales.
Y por último, para terminar, me gustaría hablar de las patéticas actualizaciones de Android. Mi modelo se está actualizando a la velocidad del rayo cada vez que Samsung lanza una nueva actualización pero lo cierto es que Android Lollipop no ha logrado mejorar lo suficiente y esperamos que Android Marshmallow consiga dar el punto de rendimiento necesario al terminal para ganar autonomía y mejorar las prestaciones de esta bestia que es capaz de rozar los 70.000 puntos en AnTuTu.
Tiene una cámara perfecta, es rápido y es bonito. ¿Qué más le puedo pedir a un smartphone de 700 euros? Pues le pediría que hiciese la compra pero como esto no es posible creo que me voy a quedar muy satisfecho por mucho tiempo y con lo bien que lo ha hecho Samsung no se ha donde debe llegar con el Samsung Galaxy S7 para convencerme de que necesito un cambio.
También hemos usado otro tope de gama durante 6 meses, descubre la opinión de una fiel seguidora de Nexus con su experiencia de uso de un Nexus 6. Eso sí, el Galaxy S6 tiene algo que este Nexus 6 no tiene, es cómodo en la mano y con sus 5,1 pulgadas se nos antoja un terminal con un balance perfecto entre rendimiento y tamaño, no queremos smartphones más grandes y esperamos que los futuros vengan por este camino, a mí personalmente no me gustaría dar el paso a un phablet que no pueda sostener con solo una mano.