Clash Royale es uno de los juegos más populares que hay ahora mismo en el mercado. Uno de los factores que le han hecho ganarse tal popularidad es la introducción de novedades de manera constante; ayer mismo os contamos que llegará una nueva carta al juego, el Fantasma. Pues bien, a continuación os contamos algunos trucos que merece la pena tener en cuenta para ganar las batallas.
Espera a que tu rival haga el primer movimiento
Aunque una batalla de Clash Royale tiene 3 minutos de duración, los primeros segundos son clave para ganar la partida. El primer movimiento es el que más cuesta siempre porque tanto nosotros como nuestro rival estamos esperando a ver quién es el primero en lanzar una carta a la arena.
Una vez nuestra barra de elixir llegue a 10 es absurdo esperar más tiempo. Por lo tanto, si para entonces nuestro rival no ha lanzado ninguna carta, podemos empezar nosotros. Pero ojo, lo ideal es que la primera carta que pongamos en la arena sea de coste de elixir bajo como por ejemplo unos duendes o un ejército de esqueletos.
De esta manera, obligamos a nuestro rival a mover ficha sin jugárnosla demasiado. Tenemos suficiente elixir para defendernos en caso de que nos lance alguna carta fuerte.
Ojo con las cartas de coste de elixir bajo
En ocasiones, cuando nos vemos acorralados por nuestro rival y no tenemos la barra de elixir demasiado cargada, lanzamos un montón de cartas de coste de elixir bajo; por ejemplo, unos esqueletos, y un bombardero. Aunque pueda parecer una buena idea en un principio, tenemos que tener en cuenta que con unas simples flechas nuestro rival acaba con todas estas tropas en cuestión de segundos.
Este tipo de cartas de coste de elixir bajo debemos utilizarlas a modo de apoyo de cartas más fuertes. Nunca hay que lanzarlas en grupo.
Anticipar los movimientos del rival
Aunque pueda parecer algo complicado eso de anticipar los movimientos de nuestros rivales en Clash Royale, con un poco de práctica es bastante sencillo. Por ejemplo, si lanzamos un globo bombástico a la arena, seguro que nuestro rival intenta acabar con él con una horda de esbirros, una carta bastante habitual en el juego. Pues bien, ante ello tenemos que tener las flechas preparadas para lanzarlas.
Con jugadores más experimentados puede resultar un poco más difícil, pero podemos intentarlo controlando el coste de elixir de nuestro rival. Por ejemplo, si nuestro rival lanza un gigante y coloca una torre infernal, ya sabemos que su coste de elixir en ese momento es cero. Podemos aprovechar para atacar.
