Estamos en tiempos de malware. Con el uso que hacemos de nuestros dispositivos móviles, estos se han convertido en uno de los blancos favoritos para los ciberdelincuentes. En Android, hemos visto numerosas amenazas en forma de aplicaciones que buscan robar datos personales. Por eso Google lleva tiempo trabajando en dar con una solución factible.
Es lógico que la compañía de Mountain View tenga como objetivo garantizar que sus servicios sean más seguros, pero también más accesibles para llegar a un número mayor de usuarios. Tanto en servicios como en dispositivos, encontramos funciones de accesibilidad; lectura de los contenidos en pantalla, subtítulos en YouTube, etcétera. El problema es que estas características pueden ser explotadas y convertirse en una amenaza para la seguridad.
Google se pone firme: podría eliminar muchas apps de Google Play
En los dispositivos Android, todo lo referente a facilitar su uso está dentro de lo que se denomina Servicios de accesibilidad. Ahí encontramos las funciones desarrolladas con el objetivo de que los usuarios con alguna discapacidad puedan utilizar su smartphone sin problemas. Por ejemplo, las personas con dificultades en la visión pueden usar la función de decir las contraseñas en voz alta o la explicación de lo que se muestra en pantalla.
También hay herramientas para estos menesteres, como Action Launcher, que expande la barra de notificaciones, el gestor de contraseñas LastPass, o Twilight, para cuidar los ojos atenuando el brillo. Este tipo de aplicaciones usan las funcionalidades de accesibilidad para ofrecer características que no vienen con los terminales. El problema es que el uso indebido de las funciones de accesibilidad supone un peligro para la seguridad de los dispositivos.
Según ha publicado el portal AndroidPolice, Google está tomando medidas en Google Play, contactando con los desarrolladores para verificar que no hacen un uso incorrecto de los Servicios de accesibilidad. Por supuesto, aquellos que emplean estos servicios para desarrollar aplicaciones que verdaderamente tienen el objetivo de hacer más accesible la experiencia, no tendrán ningún problema. Eso sí, Google ha marcado un límite de tiempo para que se cumplan sus normas.
En concreto, los desarrolladores de apps tienen 30 días. Si no garantizan un uso correcto de los Servicios de accesibilidad en este plazo, las aplicaciones serán eliminadas de Google Play. Podríamos ver cómo desaparecen títulos populares, pero en cualquier caso se trata de una medida que busca beneficiar a los usuarios. Aunque hay otros factores, como el mal funcionamiento de Google Play Protect, que hacen dudar sobre si realmente nuestros dispositivos estarán más seguros.