Soy usuario de Android (obviamente) pero, aún así, sigo siendo realista. Todavía me suelto alguna carcajada si le pego un vistazo a los titulares que veo estos días donde dice, literalmente: «Android Lollipop ya está en un 3,3 % de los dispositivos Android».
El problema no es el titular sino el adverbio de tiempo «ya». Hace 4 meses que Android Lollipop está disponible en el mercado pero, a día de hoy, todavía no ha conseguido llegar ni al 5% de dispositivos Android. Este problema no depende solo del usuario, pues las compañías deciden actualizar ciertos terminales (normalmente los de gama alta) y desechan toda actualización para los gamas media-baja y, de hecho, para los usuarios que es importante contar con actualizaciones por un largo tiempo necesitan optar por la gama Nexus, rootear sus móviles y cambiar el software o bien comprar un gama alta o un móvil amigo de las últimas actualizaciones como los Motorola.
iOS 8 ha sido lanzado el 17 de septiembre de 2014 y, a 16 de febrero, está instalado en el 73% de dispositivos iOS. Android Lollipop empezó a estar disponible hace 4 meses y solo ha llegado a un 3,3% de cuota que sigue aumentando de forma exponencial pero hay que tener en cuenta que hasta Jelly Bean sigue contando con más de un 40% de cuota, al igual que Android 4.4 KitKat.
Lollipop gana cuota de forma rápida pero está muy lejos de equipararse al ecosistema Apple.
Si echamos mano a las estadísticas podemos ver que Jelly Bean cae a un ritmo acelerado y Lollipop gana terreno de forma bestial pero los datos están muy lejos de ser esperanzadores como para hablar de un «ya». El problema de la fragmentación en Android es bestial y a día de hoy se siguen lanzando terminales que no contarán con Lollipop de forma oficial. Eso sí, con la llegada de los nuevos terminales que se han presentado en este MWC de 2015 seguro que llegaran algunos flagship con Android 5.0 de serie y esto ayudará a aumentar la cuota pero sin soñar con un 50% de dispositivos Android que incorporen Lollipop.
La fragmentación en Android es un gran problema y Google se ve obligada a prohibir un montón de aplicaciones y comportamientos por parte de los usuarios. Contar con cientos de compañías que lanzan terminales Android es algo positivo para el consumidor porque goza de precios económicos y competitivos pero, por otra parte, el no tener un SO exclusivo de un hardware hace que muchas veces no sea posible contar con una versión de Android más actualizada en su smartphone.
En Android Lollipop las medidas para proteger al usuario son más contundentes, llegando a sugerirte la desinstalación de algunas de las aplicaciones con las que cuenta tu terminal. ¿Qué te parecen estas políticas agresivas por parte de Google?
Fuentes | Android Dashboard / Apple Developer Support